Guerrita Chico paseando el triunfo cuando torea

-Si no recuerdo mal, Hernán, se cumplen ahora trece años de tu alternativa en Cali. ¿Qué lectura sacas de todo estos años?

Efectivamente, cumplo 13 años de alternativa el 27 de diciembre y el balance de estos años me ha enseñado a madurar como torero y como persona, han sido años de una lucha constante, de perseverancia y tesón. Aunque parezca una locura como tú decías, todavía me quedan fuerzas para seguir y en tan apasionada aventura vivo.

-¿Desde cuándo resides en España?

Son ya trece años en los que cargué mi mochila llena de ilusiones, para acá me vine y entre ustedes me siento dichoso.

-¿Qué significó para ti, aquel indulto del toro en la Cali, creo recordar, en el 2008?

Para mí fue una experiencia muy bonita ya que era en una plaza de primera categoría, al lado de dos figuras del toreo. Aquella tarde, aunque ya lejana, me certificó que yo no estaba equivocado; me vi seguro en el camino que emprendí, razón por la que ahora estamos conversando, el torero y el periodista.

Un momento soñado: Su confirmación en Madrid

-¿Qué lectura sacaste de tu confirmación  de alternativa en Madrid, el pasado 12 de octubre?

Sin duda, es el gran premio que he obtenido, resultado al margen, a tantos años de entrega apasionada por este arte que amo tanto. Una pena que los toros no ayudaran; en mi caso concreto, porque alguno si valió. Tenía muchas esperanzas en la corrida porque, al margen de todo, me une mucha amistad con el ganadero y, ya se sabe, el hombre propone y el toro descompone.

 -Veo, Hernán, que en España alternas en lo que llamaríamos la “tercera” división del toreo. ¿Se puede subsistir de dicho modo?

Pues la verdad, es todo muy complicado por la crisis que atraviesa España en este momento, la cual también está afectando a la fiesta brava, ya que se dan menos festejos y es más complicado para poder torear. A mí me salva un poco la temporada americana.

 -De novillero fuiste muy reconocido. ¿Cómo es posible que aquel novillero fulgurante no brillara como matador de toros?

Ciertamente es que, como novillero tuve mi cartel, tomé la alternativa y las personas encargadas de llevar mi carrera no la gestionaron como se debía. Yo en aquel momento era un jovencito que solo pensaba en torear. No me quiero consolar; pero la imagen del joven que solo quiere torear, es de lo que otros se aprovechan.

Con César Rincón a quien venera y de quien recibe consejo

-¿Qué es para ti el maestro César Rincón?

Una gran figura del toreo y un referente a seguir por todos los que estamos en esta profesión, además cuento con su apoyo y estar al lado de una figura del toreo dándote consejos es muy importante. Soy un afortunado al respecto.

-De cara a la temporada colombiana, ¿qué planes tienes establecidos?

De momento tengo tres corridas cerradas y aspiro que me contraten en las demás ferias. En Colombia también está todo muy difícil; lógicamente, es mucho más sencillo para los que llegan allí con aureola de figura que, si Dios quiere, así quiero yo llegar un día.

-Ser torero es algo muy difícil, muy complicado, pero por ejemplo Luís Bolívar, tu compatriota, sigue entrando en muchas ferias españolas. ¿Qué tiene Bolívar que no tengas tú?

Tiene unos apoderados que velan por sus intereses y le han sabido llevar su carrera sin menospreciar su profesionalidad. Como digo, que nadie olvidemos que Luís Bolívar es un gran torero que, lo digo yo, incluso merece mucho más de lo que ha logrado. En mi caso desde hace años no cuento con la ayuda de ningún apoderado y lógicamente, para mi es más complicado que se me den oportunidades ya que, yo solo gestiono mi carrera.

Aquí le vemos en un torero remate con el capote

-¿Cómo sobrevive un torero sin apenas torear y, lo que es peor, siendo extranjero?

Como antes dijimos, en mi caso, la temporada americana es un empujón para sobrellevar sin tantas dificultades el resto de temporada española, pero gracias a Dios siempre toreo un número de festejos en España, el toro no entiende de nacionalidades. Digamos que, pese a todo, me defiendo que no es mala cosa.

-¿Nunca te planteaste, por ejemplo, hacer campaña en Perú que, como sabes, es el refugio para muchos diestros sin suerte en España?

Ciertamente, es el refugio para muchos toreros que, dicho sea de paso, les ha ido muy bien, pero yo nunca me planteé esa posibilidad porque, como sabes, todos mis esfuerzos los he hecho en España que es donde quiero triunfar de verdad. Te parecerá irreal lo que te digo, pero confieso que he tenido suerte en España.

-¿Le llamas suerte a vivir de las migajas que no quiere nadie?

Sí, porque de otro modo, quizás en otro lugar, todo podría ser peor; acá, entre ustedes, toreo de vez en cuando, estoy junto al maestro Rincón para recibir sus consejos y saciarme de toda su sabiduría. No creas que sea poco lo que te he dicho.

Con la diestra el día de su confirmación

-¿Cómo te sientes ahora al ver que, lo que era tu gran ilusión, confirmar en Madrid, apenas ha valido para nada?

Con mucha resignación; tengo la certeza de que hice lo que debía, lo que los toros me permitieron; ya se sabe, como hemos dicho, que si el toro no ayuda todo esfuerzo resulta inútil, como desdichadamente ha sido mi caso.

-Si un gran valor tienes, sin duda, Hernán, es la perseverancia. ¿No te aburres de ser siempre el último, el olvidado de las empresas?

No me aburro porque tengo condiciones para llegar a ser un torero importante y no me considero olvidado por las empresas; pero sé que hay muchos intereses en mi profesión, pero el que persevera alcanza. Ahí tenemos pruebas de compañeros que, hace muy poco nadie les conocía y, tras el éxito en Madrid, ya son reconocidos por empresas y aficionados.

-De haberte quedado en Colombia, ¿hubiera cambiado el signo de tu carrera?

Eso nunca lo sabremos, pero para ser figura del toreo hay que triunfar en España. Es cierto que, de haberme quedado, lo que se dice vivir, hubiera vivido de forma muy digna, como los compañeros que allí tengo; pero yo no me conformo con vivir, yo quiero ser figura del toreo en España.

Preparándose en el campo mientras llegan los contratos