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Se estrenó como matador de toros en la bicentenaria plaza de Acho y tras una faena memorable al cuarto de la tarde que hizo delirar al público, el diestro nacional Andrés Roca Rey fue elegido por el jurado calificador como el ganador del Escapulario de Oro del Señor de los Milagros versión 2015, tras cortar cuatro orejas y salir a hombros del viejo coso bajopontino. El Escapulario de Plata fue para el toro “Travieso” de la ganadería de Daniel Ruiz.
Andrés Roca Rey ganó el Escapulario de Oro, tras cortar cuatro orejas Con más de tres cuartos de plaza y cielo entoldado de nubes, se lidiaron cinco toros de Roberto Puga, disparejos en presentación y con escala de bravura muy diferenciados, y uno de Juan Bernardo Caicedo, que era repetidor.
Enrique Ponce, Palmas, oreja y ovación tras aviso
Andrés Roca Rey, Silencio, dos orejas y dos orejas.
El diestro valenciano Enrique Ponce poco pudo hacer con el primero de la tarde que resultó noble, pero sin codicia y sólo el buen oficio del maestro que le endilgó al pupilo de Puga lo hizo ver mejor de lo que fue. Su labor fue silenciada. Con el tercero de la tarde que fuera cambiado supuestamente por falta de trapío y reemplazado por uno de Caicedo de igual trapío, el matador hispano con una serie de verónicas jaleadas inició su faena, ya con la pañosa y bien ahormado después del tercio de varas, el toro colombiano humilló y se desplazó mejor en su recorrido, en series ligadas por la mano derecha y las ya tradicionales poncinas flexionando una pierna y girando sobre la otra, que fue el delirio de los asistentes. Su labor la culminó cortando una oreja que pudieron ser dos. En el quinto de la tarde fue un toro difícil al que el diestro de Chivas lo fue sometiendo desde que se abrió de capa. Toda la labor fue realizada por el pitón derecho que tenía recorrido, Ponce fue haciendo una labor muy meritoria, y quiero creer que fue por la demora en caer el toro es que el presidente de plaza le negó el apéndice, pero la ovación al maestro fue sonora.
Nuevo en ésta plaza, a pesar de ser de casa. Cuajado y maduro es el hoy torero Andrés Roca Rey. Con su primero un toro justo de fuerzas hizo una labor de enfermero para que no rodara por los suelos. Estuvo muy variado y lucido con el capote, verónicas, delantales, tafalleras y caleserinas, en resumen, vino a meterse al público en el esportón y lo logró. Con la muleta ´poco pudo hacer porque el animal llegó sin recorrido. Su labor fue silenciada. El cuarto de la tarde fue de escandalera, el toro que fue noble y repetidor, dejó ver el cofre del arte de Andrés Roca Rey, quien realizó una faena no sólo de emoción, sino que lleva de técnica propia de un torero dominador y que está en ascenso en su tauromaquia, deja una estocada en todo lo alto que hace rodar al pupilo de Puga y el juez acertadamente le otorga las dos orejas. El que cerró plaza y feria fue un toro que salía suelto, con poca bravura, y Roca Rey volvió a realizar una faena aseada y técnicamente muy bien estructurada. Acho se volvió a encender con el apasionamiento de ver a un niño hecho torero, aquel que le viéramos en un festival, luego en una novillada y hoy como matador, llenó el ojo al más incrédulo. Dos orejas fue el resultado del cerrojazo. Salió a hombros de su hermano el también matador Fernando Roca Rey, y el jurado no dudo en darle el escapulario.Enrique Ponce por derechazos El valenciano cortó una oreja en Acho Andrés Roca Rey toreando con la derecha Un cambiado en manos del diestro peruano Roca Rey Roca Rey al natural
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