El pasado miércoles día 30 de noviembre, algunos aficionados tuvieron la oportunidad de escuchar puntos de vista del arrendatario del coso mayor, esto durante las tertulias “Café, chisme y vino”. Sobre este asunto, el periodista Miguel Ángel García del diario deportivo Esto, dio a conocer algunas de las preguntas y respuestas a las mismas.
Acerca de la publicidad en la fiesta comentó “Es carísima; se gasta más del cincuenta por ciento de los ingresos de la plaza. Hay dos programas de televisión taurinos y uno se dedica a fastidiar…” Surgió entonces la pregunta del por qué el canal 11 no entra a la plaza, a lo que comentó “Esa gente sólo me ha insultado y agredido; no lo permitiré aunque me lo pida Dios…”
En el canal 11 sólo se han hecho juicios críticos sobre su gestión como empresario del coso mayor y lo han calificado como un mal empresario. Eso no es ningún ataque ni insulto, es una opinión y repito, un juicio crítico.
El tema acerca de por qué César Rincón no actuará en la temporada: “Tenía un contrato con Zotoluco y Castella; Zotoluco no quiso torear por el convenio y Rincón ya no quiso, si no estaba él” El maestro César Rincón merece el respeto y que se le dé la categoría como figura que es. Los carteles con las figuras siempre son los mismos y ya están muy vistos. Rincón merece ser incluido.
El cartel del Teletón: “No hay más. He tratado de poner a todos los toreros y a todas las ganaderías”. “Doy 20 corridas de toros y hay 50 ganaderías”. Por principio, esta no es una oportunidad para los toreros jóvenes. Esto es no saber confeccionar un cartel. Son toreros que no tienen poder de convocatoria y es obvio que la plaza va a estar vacía.
Montar 20 festejos en una temporada no significa dar oportunidades. La verdadera oportunidad es poner a los jóvenes con las figuras, esa es la única forma de darse a conocer. Esa si es la manera de aportar a la fiesta. Los triunfos con carteles que no llevan gente a la plaza simplemente no trascienden.
¿Por qué Rafael Ortega no repitió después de cortar un rabo? “Por los compromisos que tenía. El señor tiene dos contratos con la Plaza México y dijo que no toreaba con El Fandi ni con Morante. Él firmó antes de que se revisara el convenio…”. El matador Ortega declaró que él estaba con su asociación además de que los contratos que habían firmado estaban en blanco. Su dignidad y respeto esta por encima de todo y sin la Plaza México ha toreado alrededor de 70 festejos.
Acerca de los 4 años reglamentarios del toro comentó: “El reglamento es una falacia y una tontería. El toro que vale es el que todos aplaudimos y el que tiene pases.” Partimos de que existe una reglamentación en la fiesta brava y se debe respetar. Al mismo tiempo esa es la tradición.
El toro pequeño lo aplauden 5 mil, ¿no sería mejor que el toro íntegro lo aplaudieran 50 mil? El toro es el protagonista. El trapío no es un elefante, no son kilos; es el toro íntegro, en puntas, con cuatro años, bien conformado y con la presencia suficiente y digna para el coso mayor. Esa es la verdad y la emoción de la fiesta.
