Y como tal, se debe desarrollar. Una fiesta y un espectáculo y todo lo que se realice dentro del mismo, que resulte espectacular, artista, emotivo o torero, debe ser aplaudido y reconocido como exitoso.
Todo esto, viene a consecuencia de la conversación, que mantuve hace unos días con un amigo de hace muchos años y que en la actualidad ejerce de banderillero, en las cuadrillas de muchos novilleros, dado que va por libre y no tiene matador fijo. En esta conversación, hablábamos de uno de estos novilleros con los que torea y que en esta temporada, este novillero había pegado un buen aldabonazo, triunfando en muchas plazas y ferias, entre las que se encontraba Madrid. El comienzo de temporada con este torero, era incierto, como suele ocurrir en estos casos, pero durante la temporada, el número de festejos en los que actuaba, aumentaba día a día, con la consiguiente alegría para todos, tanto torero como cuadrilla y amigos. Las expectativas, para la temporada que viene eran muy esperanzadores, porque este novillero, está en todas las quinielas de los aficionados, para ser uno de los novilleros punteros, por lo que hasta el otro día, me alegraba bastante, tanto por mi amigo como por su hermano, que también formaba parte de esta cuadrilla, pero mi alegría duró muy poco, puesto que cuando tuve la conversación telefónica con él, me comentó que les había echado de la cuadrilla, sin acreditar ningún motivo. No es que estén en obligación de dar ninguna explicación, pero creo que por ética y sobre todo por educación, deberían haber explicado a estos toreros de plata, porque no se cuenta con ellos, o a lo mejor la razón de no hablar con ellos, puede venir provocada, porque no es muy normal la causa por la que se les expulsa de esta terna.
Y es que, la historia yo creo que viene de muy atrás y les explico, en principio para ¿entender? el despido, les contare que estos dos pedazos de banderilleros, se han entretenido, en irse desmonterando tarde tras tarde, en todos los cosos donde actuaban, contando entre sus gestas con los rehiletes, varias tardes en la plaza de Toros de Madrid, a parte de todo esto, los dos son excelentes capoteadotes y para mi entender, están entre los mejores bregadotes del escalafón, pero realmente el tema del capote, considero que no ha sido la causa, porque no entendería, que se eche a un banderillero por ser muy bueno con el capote. Pero, ¿se puede expulsar a un peón, por ser muy bueno con las banderillas?, a mí modesto entender no, pero me da la sensación, que en esta ocasión, estamos hablando de que esa y sólo esa es la causa de la expulsión.
Durante la temporada, se había oído, en múltiples ocasiones, que la espectacularidad de los dos hermanos y su facilidad con los palos, no sentaba nada bien, a los representantes del torero, ya que por lo que se ve no les gustaba que fueran ellos, los que triunfaran tarde tras tarde, por lo que en cuanto tuvieran ocasión los iban a largar y así ha sido.
Lo más grave de esto, es que estoy seguro que no lo han consultado ni siquiera con el torero, dado que éste tiene una muy buena relación con sus peones, así que a partir de ahora que le planten en la cuadrilla dos viejos que no molesten, pero que hagan las cosas de pena, que es lo que interesa.
Es triste, que al final el torero, es el que menos pinta en toda esta historia y el perjudicado es él, pero no sólo se perjudica al novillero, que sepan sus apoderados, ponedores, pelotas, lameculos y todos los que circulan alrededor del torero, que también perdemos los aficionados, porque como decía al principio, ¡ESTO ES UNA FIESTA!, y debe de ser así y toreros como estos dos banderilleros, deben estar todas las tardes en la arena, porque muchas, pero que muchas tardes, nos vamos a casa, sólo con un buen par de banderillas o un puyazo y esos detalles los tienen los buenos toreros de plata, que los hay y muchos, aunque no los dejen realizar su trabajo.
Y es que, da gusto ver a todo aquel que se viste de luces, ser TORERO, porque en el ruedo no sólo hay un torero, hay muchos y deben actuar como tales.
Y lo que nunca deben hacer, ni mis amigos ni otros muchos que les ha pasado lo mismo, es lo que están pensando ahora estos dos torerazos de plata, porque me decían el otro día, “la próxima vez que me coloque con un torero, procurare molestar menos”.
TORERO, tú no molestas, los que molestan y están jodiendo la fiesta son los otros.