Si señores, después de muchos años, casi diez u once, por lo menos en el papel Cali vuelve a tener una feria de la categoría que se merece la más dulce ciudad de Colombia. Después de muchos ires y venires, sobre todo al principio cuando se dudó de que se pudieran volver a anunciar las figuras en Cañaveralejo, se han conjuntado carteles cerrados y redondos la mayoría de ellos, en una feria que recupera por fin la categoría que nunca debió perder.
Sin duda el gran gestor de estos resultados, así a muchos les duela reconocerlo ha sido el Gobernador del Valle, al que sin duda le gusta figurar y aparecer allí donde le dejen, pero que se puso como meta, luego de asistir a la última feria en la que seguro se dió cuenta que había un hueco inmenso frente a lo que siempre tuvo Cali y por tanto debía recuperar la categoría de su feria taurina. No se si no hubiese sido por la insistencia del gobernador en volver a traer a las figuras si la feria hubiera sido conformada como lo fue, les cabe también a los empresarios el mérito de haber echado palante y de concretar la idea del gobernador, asesorándose de quienes les ayudaron a contactar a quienes debían contactar.
Desde la temporada 98/99 no se lograba una feria tan rematada y seguramente los tendidos de la entrañable, calurosa y acogedora plaza de Cañaveralejo volverán a registrar los llenos de antaño y el ambiente envidiable en sus corridas de fin e inicio de año
En la feria destacan cuatro carteles dentro de una media alta, y destacan no solo porque se anuncien figuras, que hace mucho no venían, sino porque se combinan con otros que seguramente los espolearan y que garantizan competencia. El cartel del día 28 con “Juli” y Perera y la última gran oportunidad de Diego González frente a los Santacoloma de Ernesto González, el mano a mano del día 29 con el renovado Castella y Luis Bolívar frente a los toros triunfadores del año pasado de Juan Bernardo Caicedo, el del día 30, quizás el más rematado de todos, con "Juli", Castella y el mismo Bolívar pero con la incógnita de los Puerta de Hierro que por el resultado del año anterior no debieron anunciarse y el del día 3 de enero con la reaparición de Ponce, acompañado de Perera y Alzate frente a los renovados Fuentelapeña, son los de más relumbrón.
Destacar también como gran acierto el haber agotado todas las instancias para que Luis Bolívar estuviera en la feria, porque no se hubiese entendido al hacer un esfuerzo considerable por traer las figuras y haber regateado algunos pesos a Luis que ha hecho una impecable temporada española con corte de orejas en Sevilla y Madrid y más allá de eso, ser hoy la principal figura americana en los ruedos.
Como siempre lo hizo Cali se apuesta por nuevos valores, como Daniel Luque, que goza de muy buena prensa en España y acaba de triunfar fuerte en Sevilla, pero estos nuevos valores siempre deben ser complemento a una estructura sólida y no ellos mismos ser bases de la feria como se hizo en años pasados. Este año está en tres carteles interesantes, con Perlaza y Manotas el dia 31 con los otros triunfadores del año pasado, los Salento, con Ferrera y Bolívar el dia 2 frente a los Guachiconos y en la tradicional corrida del toro del día primero con la novedad de La Carolina.
Pero como en todo pues no podían faltar pequeñas cosas que faltaron en la feria , la primera , la no inclusión de Mondoñedo, ganadería referente en el campo bravo colombiano que ha tenido dos muy buenas presentaciones en el ruedo caleño en los últimos años y que si fuera por méritos debería estar en los carteles, y la segunda, a mi particularmente no me gustan los carteles mixtos de un rejoneador y dos toreros, son como de menor entidad, otra cosa es si a una terna la acompaña un rejoneador, pero eso ya es de gustos y quizás de presupuesto.
Capítulo aparte a la muy buena feria que han logrado merece la alternativa de José Fernando Alzate, de la que espero equivocarme pero se me antoja un tanto apresurada. Faltó que hiciera el periplo novilleril en todas las plazas de temporada, un poco más de rodaje y ahí si, saltar al escalafón superior porque encarna una esperanza factible de renovación de la torería colombiana.
Esperamos pues que a estos muy buenos y rematados carteles no queden como digo al inicio solo en el papel y los acompañe el factor fundamental en esto. El toro. Espero que la ecuación figuras del toreo, toro bien presentado, no se vaya desbalancear a favor de los primeros en desmedro de la buena presentación del toro que siempre se pregonó en Cali. Si sale el toro como debe salir al ruedo caleño seguramente disfrutaremos de una feria de la altura que siempre mereció Cali.