inicio / opinion y toros
 
   
   
Inicio
Editorial
Opinión
División de Opiniones
El Arte del Rejoneo
Reportajes
Mano a Mano
Tribunas
Noticias
San Isidro
Enlaces
Novedad Quiénes somos
Buscador OyT
   
 
Previsión del tiempo para MADRID
 
 
Gracias por seguir con nosotros

Lázaro Echegaray  
  España [ 14/10/2016 ]  
CIERTA CONDICIÓN HUMANA SE ESTÁ HACIENDO CULTURA
Complicado, en una semana como ésta, dejar de lado el tema de mi paisana, la indeseable Aizpea, hija de un pueblo en el que tanta y tanta gente de bien hay. Aizpea ya le ha demostrado al país entero la clase de gente que son ella y los suyos y lo que entienden por no ser ‘políticamente correctos’. Vamos, que si no fuera por esa supuesta corrección, ella y otros/as como ella ya hubieran salido a la calle estoque en mano a ejercer una justicia nada correcta pero muy deseada. Sueñan con nuestra aniquilación. Nos odian. Eso es lo que hay en el fondo de todo antitaurino militante, odio y seguramente problemas de clase y de percepción. De lo de la defensa de los animales y todo eso, olvídense ustedes, es una coartada que cae según abren la boca o cogen el twitter. En todo este caos de moralidad que reina en las cabezas de aquellos/as que creen estar por encima de los demás hay algo en Aizpea que puede hacer que te partas de risa, o que brames al cielo: Aizpea es masajista terapéutica, trabaja sanando a gente con problemas a la vez que desea abierta y impacientemente la muerte a niños enfermos de cáncer: “Adrían muérete ya” que es como decir, cuánto antes hombre que molestas. Yo no me ponía en manos de esa chica para que me sane, de verdad, no solo por el asco y repugnancia que ahora me da sino por el peligro que correría así a ella le pareciera mal mi procedencia,  mi lugar de residencia, profesión o mis gustos literarios, lo que podría generar su deseo de exterminarme ya con gas, con garrote vil, fusilamiento, linchamiento y otras formas de exterminio que la historia nos ha enseñado y que han sido realizadas por hombres a los que seguro que la comprometida Aizpea odia, pero a los que tanto se parece. Resumiendo, que Aizpea es una facha obsesiva, que es una característica del fachismo, con serios problemas de racismo, discriminación y por supuesto carente de empatía y de sensibilidad humana. En definitiva, alguien peligroso para la sociedad, alguien a quien no se debería dejar ejercer cargo público; alguien a quien no confiarle tu salud a menos que uno sea un ser herbívoro. 

Cobarde, también lo es. Ha borrado toda presencia suya en la red. Seguro que en los chats privados se mensajea con otros de su cuerda que le alentarán y le dirán que tiene unos huevos como el caballo de Espartero. Y Aizpea, que quizás también sea feminista, por inercia, más contenta que unas castañuelas con sus atributos equinos y presumiendo de haber cogido al toro por los cuernos. Pero acojonada para la realidad, ausente de las redes que tanta voz le han dado y en donde tan a descubierto ha quedado.
 
Sorprendidos han debido quedar también sus compañeros/as de trabajo en Bilbao que no han tardado en sacar un comunicado a las redes asegurando que nada tienen que ver con semejantes declaraciones, ni con ella. La desvinculan de la empresa. Al parecer, un grupo de ciudadanos se han dirigido a su lugar de trabajo para preguntarle, más o menos, qué clase de hija de puta era ella. Era una pregunta retórica. Pero ella no trabajaba allí desde 2009. En la carta a los medios que lanza su ex socia, uno cree entender que la ruptura entre ambas se generó porque Aizpea tenía unos valores morales un tanto especiales, o cuando menos valores vitales que se descubrieron con el paso del tiempo y que no estaban previstos. Visto lo visto, suena creíble.

Atendiendo a esa razón, podríamos pensar que lo sucedido tiene que ver exclusivamente con el temperamento y la ideología de esta chica tan sensible con algunos seres vivos, preferiblemente herbívoros. Pero eso no es del todo cierto, no nos encontramos ante un caso puntual. Ya hemos visto las posiciones de gente como Aizpea tras la tragedia de este verano. En su grupo de fanáticos, estos puntos de vista son cultura y la sociedad entera tiene que aceptarlos por eso que llaman respeto a la libertad de expresión. Pero en este caso, esa libertad empieza en Adrián, no en la indeseable misantropía de Aizpea y compañía. Quizás convenga advertir a quien corresponda: nos insultan, nos desean la muerte, se congratulan cuando ésta sucede. Son temas muy serios ¿Se permitiría esta actitud en cualquier otro campo que no fuera el taurino? 

Hay dos fotos de la susodicha en la red. En una sale abrazando a un perro. En la otra a lo que parece ser un bebé. Qué dos fotos más a propósito para hacerte chistes Aizpea. Lo que no es para chistes es que aún no hayas pedido perdón públicamente, no te hayas vuelto a dar de alta en las redes, o hayas escrito una columna para el periódico, para decirle a Adrían y a su familia que te has pasado, para demostrar que todavía te queda una gota de humanidad en las venas, aunque no sea verdad, aunque solo sea para aliviar a los seres herbívoros involucrados en tus macabras declaraciones. 
 
   
  haznos tu página de inicio   
 
EL FINAL DE UNA ETAPA
LLEGAMOS A DONDE QUISIMOS. PUNTO Y SEGUIDO
ETERNAMENTE… GRACIAS
Op. / Castro
Editorial del Mes
Op. / Plá
EL FINAL DE UNA ETAPA
LLEGAMOS A DONDE QUISIMOS. PUNTO Y SEGUIDO
ETERNAMENTE… GRACIAS
 
D. MÁXIMO GARCÍA PADRÓS: El Ángel de la Guarda de los toreros
¿QUÉ HA SIDO LO MEJOR DE LA TEMPORADA 2018?
LA FERIA QUE LO CAMBIA TODO
Mano a mano
Div. Opiniones
Reportajes
D. MÁXIMO GARCÍA PADRÓS: El Ángel de la ...
¿QUÉ HA SIDO LO MEJOR DE LA TEMPORADA 2018?
LA FERIA QUE LO CAMBIA TODO
 
TOROS EN QUITO: DE MAL EN PEOR /
UNA ETAPA MÁS /
NO VALE RENDIRSE /
Op. / Ecuador
Op. / España
Op. / Venezuela
TOROS EN QUITO: DE MAL EN PEOR
UNA ETAPA MÁS
NO VALE RENDIRSE
TODAS LAS NOTICIAS DE CADA PAÍS
España   Francia   Portugal   Colombia   México   Ecuador   Perú   Venezuela 
 
Oyt en Facebook
 
Oyt en Twitter
 
 
     
 
 
 
     
escucha el pasodoble  
 
 
   
  opinionytoros.com  
© diseño web BIT FACTORY, S.L.
Antolín Castro Luis Pla Ventura