Estamos terminando enero del año en curso y, las especulaciones son la comidilla diaria, sencillamente, porque hay ganas de toros, los aficionados estamos ávidos de noticias importantes que no son otras que ver a los diestros más significativos en el lugar que les corresponde. Todo son rumores y los mentideros cuentan y no acaban; señal inequívoca de que queremos ver hechos realidad aquellos carteles que soñamos.
Como primeras ferias importantes tenemos a Castellón y Valencia, pero no es menos cierto que todo gira con mucho más ardor entre Sevilla y Madrid. Las ferias levantinas son de contenido más amable, importantes para los que en ellas participen, pero sin ninguna decisión trascendental para el devenir de la temporada. Es por ello que nos aferramos a Sevilla y Madrid; Sevilla por el marco de su plaza pero que, como sabemos, tampoco decide nada para el resto de la temporada.
Curro Díaz, al que según se dice, este año será el consentido de Madrid
Respecto a Sevilla no habrá sorpresa alguna, se juntarán los unos con los otros, harán los carteles de siempre con el toro amable y todos serán felices. Acudirán todos los que tienen el caché de figuras, algunos emergentes –muy pocos-, si acaso algún paisano contratado por lástima y poco más. Pero sí debemos recordarle a la empresa que no puede faltar jamás a la cita hispalense el diestro Curro Díaz tras lo que fue su temporada pasada. Curro Díaz, al margen de su apoteósica campaña del año pasado, debemos recordar que en Sevilla casi que se deja la vida en una tarde de infortunio mientras estaba creando una bella sinfonía taurina, al margen de recordarle en su tarde más hermosa cuando ridiculizó a El Juli y a Manzanares. ¿Será por eso que no le volvieron a contratar?
José Tomás, el sueño de Madrid,,,,y de todo el mundo
Dios quiera que, quedándonos en Madrid, para el domingo de Resurrección se confeccione el cartel digamos estrella puesto que así se demostró en la pasada feria de Otoño, es decir, Curro Díaz y José Garrido en mano a mano. Será difícil que olvidemos lo que ambos diestros hicieron el pasado año en Madrid, ante todo, amén de jugarse la vida, inundaron a Madrid con su arte. Claro que, como dice el refrán, nunca segundas partes fueron buenas. Quiera Dios que nos equivoquemos.
Se dice que Casas ha ofrecido a Curro Díaz cuatro tardes en Madrid, la citada en Resurrección, dos en la feria de San Isidro y nuevamente en la feria de Otoño, de ser así, sería el valor en alza más importante para la plaza de Madrid, todo ello basado en lo que han sido las actuaciones del diestro de Linares en Las Ventas. Si esa noticia se confirma será que Madrid y su empresa saben impartir justicia.
Como digo, precisamente para Madrid se hacen muchas especulaciones, todas las del mundo. Casas sabe que puede hacer carteles importantísimos, entre ellos, uno con Curro Díaz y Morante mano a mano con toros de Adolfo Martín, un cartel estrella que no dejaría indiferente a nadie. Dicen que Simón Casas tiene guardadas en la recámara varias bombas que hará explotar en la feria de San Isidro, algo que le agradeceremos todos porque lo vulgar ya lo conocemos, el estereotipo nos lo sabemos de memoria. Hacen falta pues, carteles que arrebaten e antemano. Claro que, una de las bombas a las que nos referimos podría ser la inclusión de José Tomás en dos tardes para la historia, pasada la feria isidril, algo que conmocionaría a todo el mundo. Es cierto que, dicha contratación, si no la logra Simón Casas, no lo logra nadie; en Nimes ya consiguió que José Tomás se encerrara con seis toros. Démosle tiempo, arropémonos con nuestras ilusiones.
La feria de Madrid da para mucho, confiemos pues en Simón Casas para que no deje indiferente a nadie y, ante todo, que le asista el suficiente ingenio como para montar carteles con enorme atractivo al margen de los nombres de sobra conocidos por todos. ¿Y si para colmo, los toros que contrate les dan por embestir? Eso sí sería el gran milagro, pero si lo ha logrado en Nimes, por citar una gran plaza, ¿por qué no esperar dicho milagro en Madrid?
