Una pendiente en Francia es el éxito de las novilladas sin caballos o sin picadores como se dice en este país.

Llenos o casi llenos en Dax y Mont-de-Marsan para ver a jóvenes becerristas, la mayoría desconocidos del público, algunos apenas debutando y viniendo de países lejanos a probar suerte en Europa como lo hicieron con relumbre el mexicano Arturo Gilio, o el salmantino Manuel Diosleguarde en Bayona la semana pasada.

Vuelta de Manuel Diosleguarde en Bayona - 03/09/17 - Fotos JCO

Puede sorprender a los aficionados extranjeros, españoles incluidos, de ver entradas tan importantes para este tipo de festejos. Es que las empresas locales cuidan la organización de estos festejos menores como si fuesen novilladas picadas, a la gran sorpresa de los debutantes de este primer escalafón.

Impresionante lleno en Dax para la final del certamen sin caballos - 15/08/17

Lo cuidan por la responsabilidad que les da de organizar festejos a la usanza española en lo que es la frontera norte con las tierras sin toros pero con leyes, antis y redes sociales activas que no perdonan.

Lo que estas empresas quieren también es sembrar afición. De ahí la multitud de niños y jóvenes que pueden ingresar a estos festejos con entradas gratuitas o tarifas especiales. Se trata de que esta juventud sea la que un día tome el relevo y que se identifique con jóvenes toreros de una edad cercana a la suya, viendo que en este mundo 2.0 también existen realmente valores que hablan de honor, coraje, ímpetu, carácter y personalidad. Aun siendo joven.

El éxito también se debe en gran parte al ganado que cuidan los criadores locales que son Jean-Louis Darré (L’Astarac y Camino de Santiago), Paul y Jérôme Bonnet (Lartet), Philippe y Pierre Bats (Alma Serena) o Guillaume y José Bats (Casanueva) que lidian erales en las plazas de 1ª precitadas y en otros cosos aficionados como Pontonx-sur-l’Adour, Arzacq, La Brède, Éauze, Rion-des-Landes, Castelnau-Rivière-Basse, entre tantos otros ruedos.

Faltaban las de Saint-Sever que clausurara la temporada francesa con su tradicional novillada sin caballos de los encastes minoritarios el 11 de noviembre y la del próximo domingo 17 de septiembre en Vic-Fezensac, aunque esta plaza sea el templo de los toros con picadores.

Anuncio de la novillada sin caballos de Saint-Sever

Cartel de la feria 'Toros y Vinos' de Vic-Fezensac

Nada incompatible por cierto, lo que cuenta es la afición a este mundo de los toros, con o sin caballos pero con público y afición.