S.I.18.- Una tarde más para ir completando el larguísimo ciclo isidril. Un día más con invento de titulación al festejo. Hoy tocaba el Desafío Ganadero.

Sin duda a alguien le gusta hacer producción de lo que sea con tal de salirse del tiesto y hacer creer que cada invento interesará al público. La cosa no sale, el desafío se queda en nada. Ni hay toros para que se enfrenten dos hierros, tres de cada uno. Antes de empezar ya no cuadra, de Rehuelga solo se han salvado dos en el reconocimiento, de Pallarés habrá cuatro, la balanza se inclina para uno que doblará al otro en número de oportunidades. Luego la taquilla marca cuánto ha interesado el invento: poco más de media entrada, desafío perdido, la segunda peor entrada de la feria.

Luego, tras la devolución de uno de Pallarés, se completará con un sobrero de José Luis Marca y ya con eso queda descafeinado el desafío. Nadie desafía a nadie y todo será como una tarde más. Eso sí, se delimita el terreno de colocar los toros para la suerte de varas como si fuera una corrida concurso, en este caso concurso de cuatro contra dos que queda en tres, dos y uno. O sea, ni mano a mano ni concurso, otro desafío perdido.

Los espadas que componen la terna, ávidos de oportunidades intentan hacer el primer tercio como sería debido siempre, algo es algo, y después se esmeran en sacar partido a los toros que les ha correspondido.

El resumen es bastante pobre en cuanto a resultados. Iván Vicente deja su huella torera en algún lance y en algunos naturales. Poco pero que sirve para que el público le tenga en consideración y le premie con una ovación, en su segundo no fue así por sus fallos a espadas.

Javier Cortés resultó cogido por el que no era del desafío. Foto: Plaza1

Javier Cortés se le ve que viene con la intención de no dejar pasar la oportunidad y nuevamente es herido en Las Ventas. Disposición plena, susto mayúsculo y, como diría Pla Ventura, Dios ha sacado un abono este año. El parte habla solo de un puntazo. También resultó ovacionado en el de Pallarés, por correr turno, y se retiró herido tras matar al sobrero de José Luis Marca.

Javier Jiménez ha cosechado peor resultado que sus compañeros, viendo silenciadas sus dos actuaciones. Menos dotado en lo artístico y también menor su disposición y posibilidades con el lote. Pero tampoco le hemos visto muy animado.

Con tres tardes más acabaremos el ciclo. Otro duelo para dos  rejoneadores: Ventura y Cartagena. Los dos hierros que faltan de lidia a pie, se apellidan igual: Adolfo y Victorino Martín. Esperemos que podamos ver algún encierro completo que nos falta, tras tantos días, en la feria o que haya suficientes toros que dejen buen sabor de boca en la afición.

Otro desafío para todos: acabar con buen sabor de boca y sin agujetas de subir escaleras a diario para alcanzar la localidad.